El barco y los puertos

Navegamos por mares hermosos y difíciles, contra la corriente y enfrentando grandes remolinos. La tripulación bajaba en cada puerto y disfrutaba de la vida en tierra firme, de sus licores y bellas mujeres que entretenían las noches iluminadas por la luna. Fueron intrépidos y visionarios, conociendo pueblos al borde del mar, al costado de las carreteras. Resaltaban por su verborragia e histrionismo, eran queridos por sus aventuras. Se vislumbraba su acento argentino, así como también ese aire vasco que provenía del continente vecino. Luego de muchos viajes, de muchas anécdotas, se divide el Perla Negra (sin ningún botín, cada vez más pobre, pero siempre feliz). El Tano Algieri, Sequita Poverene y los vascos pa Venezuela.
El doctor (muchacho con barba de la foto) nadie sabe bien donde está.
El capitán Tito y pata de palo Chiprut anclados en Medellín.
Próximo puerto, quien sabe....